15 de agosto de 2010
ESCRIBO
Profundidad en las cuidadas palabras,
constantes esfuerzos por mejorar,
poemas que consumo de intensas caladas
y llenan mi alma...
y siempre quiero más.
Un vacío dentro de mi persona,
sentimientos que no se hacen fáciles de expresar,
frágiles intentos de auto psicología
que si no me dan fuerzas me terminarán de matar.
Y escribo, el fuego alcanza todos los rincones,
sucede que cuando finalizo encuentro la paz
y pienso, al blanco y negro se me tornan los colores
he muerto, escribo y vuelvo a resucitar.
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A veces me pasa lo mismo cuando escribo, ea y ahora te voy a hacer un poquito de publi. chao hermano
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